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Las “multi herramientas”
Es sabido que muchas ideas nacen de manera imprevista, impulsadas por algún hecho fortuito, y que la mayoría de las veces, esa repentina revelación no nos permite imaginar qué implicancias puede llegar a tener en nuestras vidas.
Lo sucedido a Tim Leatherman, no escapa a la norma. Todo comenzó en 1975, durante un viaje que él hiciera a Europa con su esposa. Siendo los dos muy jóvenes, recién casados y con muy pocos fondos disponibles, el viaje fue lo que puede llamarse “de bajo presupuesto”, trasladándose en un pequeño y destartalado Fiat 600 que habían alquilado, y pernoctando en hoteles de tercera categoría.
El viaje estuvo plagado de inconvenientes con el automóvil en que viajaban, y con los hoteles que visitaron: un desinflado motor que se negaba a arrancar, tornillos que se aflojaban en el carburador o la carrocería, problemas en lavabos, inodoros, y cerraduras de puertas de los hoteles, que constantemente requerían ajustes improvisados, demostraron ser mucho más de lo que el ingenio y buena voluntad de Tim podían afrontar con la única herramienta que llevaba a mano: un sencillo cortaplumas de boy scout con muy pocos accesorios.
Como resultado de este continuo desafío a sus habilidades mecánicas, y a su única herramienta, a lo largo del viaje, fue concibiendo la ida del adminículo que hubiese necesitado durante todas sus vacaciones. Apenas regresara a su hogar en Portland, Oregon, en los EE.UU., Tim se volcó al diseño de lo que había soñado (y hubiese necesitado) para afrontar su accidentado viaje por el Viejo Mundo: una por entonces rarísima cruza entre una cortaplumas multi usos del Ejército Suizo, y una pinza de electricista.
Siendo un ingeniero mecánico, Tim Leatherman no tuvo mayores problemas en crear algunos prototipos de su idea, hechos con cartón, o madera, y luego algunos prototipos metálicos, confeccionados con las escasas herramientas que poseía en el sótano de su casa. Básicamente consistía en una compacta pinza, en cuyas “patas” se escondían varios accesorios, como lima, destornilladores, y hojas de corte como las empleadas en navajas y cortaplumas.
En 1980 perfeccionó su idea, y obtuvo su patente de invención para protegerla. Bautizó a esta nueva tipología que acababa de inventar, con el nombre de “Multi Tool” (multi-herramienta) y como marca de fábrica registrada, optó por su propio apellido: “Leatherman”.
Así armado con sus ideas, planos y diseños registrados para protegerlos legalmente, comenzaría una larga e infructuosa peregrinación, en búsqueda de una empresa a la cual interesar para fabricarla en serie, mediante el pago de una regalía. Pero vender su idea no fue fácil: cuando contactaba a una fábrica de herramientas, le respondían que mejor tratara de interesar a una fábrica de cortaplumas, mientras que cuando la ofrecía a una de estas últimas, le sugerían lo contrario. Por lo visto, nadie veía futuro en el invento, ni se quería arriesgar a fabricar e intentar vender este novedoso implemento.
Así las cosas, decidió que lo mejor sería intentar encarar la fabricación y comercialización de su invento, él mismo. En 1983, con la ayuda de un nuevo socio, y alquilando un espacio en un taller del padre de este último, comienza a producirlos en pequeña escala, proponiéndose una meta de ventas de 4.000 ejemplares al año. También contacta a algunas empresas de ventas por correo, para ofrecer su producción por dicho canal. Ese año de 1983 es muy pobre en ventas, pero durante 1984 sucede el milagro: sus dos o tres canales de ventas por correos comienzan a renovar pedidos, unos tras otros, y entonces, gradualmente, el techo previsto de 4.000 ejemplares anuales es superado en pocas semanas.
Al finalizar el año, se contabilizaban 30.000 ejemplares vendidos, y la improvisada fábrica alquilada dio lugar a un edificio propio, que posteriormente tuvo que aggiornarse, creciendo en distintas etapas, para responder a los incrementos de demanda que sobrevinieron con el paso del tiempo. Los eventos de los años posteriores, ya son historia. Para 1993, Leatherman ya tenía en funcionamiento una importante planta industrial, cuya capacidad crecía en forma exponencial cada año, para atender la demanda siempre creciente.
Nuevos modelos, nuevos accesorios, la presentación de un modelo mas compacto, de una navaja, y de una linterna de alta tecnología, son hitos en la marcha de esta industria que nació a partir de una idea surgida en un viaje de vacaciones lleno de problemas e inconvenientes. Pero más importante aún, es que su idea fue impuesta no sólo a nivel mundial entre los consumidores de su marca, sino que además fue impuesta aún entre aquellas grandes empresas a las que alguna vez Tim Leatherman intentó vender su idea sin mayor éxito. Efectivamente, en la actualidad no existe prácticamente ninguna fabrica importante de cuchillería, que no haya incorporado uno o varios modelos de lo que ha dado en llamarse en forma genérica “Multi Herramientas”, y hasta algunos fabricantes de herramientas o de equipos de camping, han incorporado versiones de las mismas a sus líneas de productos.
Anatomía de una Multi-Herramienta
El esquema elegido por Leatherman para su multi herramienta original es el mismo que adoptaron posteriormente sus competidores, y el que se mantiene hasta la actualidad por casi todos los fabricantes. Básicamente, se trata de una pinza de uso general, en cuyas “patas” encontramos, alojados en sus extremos, diversas herramientas que pivotan en un eje, permitiendo su plegado en el interior de dichas patas, donde permanecen guardadas hasta el momento de requerir su empleo. Las pinzas pueden permanecer siempre expuestas, o en algunos casos se pliegan dentro de sus propias patas. En todo caso, su presencia es la característica distintiva de esta tipología, al punto de poder describir a las multi herramientas como una pinza compacta con diversos accesorios, para distinguirlas de los cortaplumas multiusos como los del Ejército Suizo, con los cuales muchas veces son comparados, y con los que son evaluados habitualmente a la hora de decidir una compra. Las herramientas accesorias son similares a las que encontramos en algunos cuchillos del tipo del Ejército Suizo: limas, punzones, hojas de corte, destornilladores de cabeza plana o “Phillips”, etc.
¿Qué elegir? ¿Un cuchillo de bolsillo del Ejército Suizo, o una Multi Herramienta?
Muchas personas me plantean la pregunta, a la hora de decidir la compra de alguno de estos implementos. Y mi respuesta es que desde mi punto de vista personal, se trata de elementos totalmente diferentes, con usos y posibilidades particulares y, por tanto ofrecen ciertas dificultades a la hora de compararlas entre sí. Es decir, yo no me plantearía llevar en el equipo de camping, en la lancha, en el avión particular, o en cualquier equipo destinado a actividades al aire libre, una u otra tipología, sino que de ser posible preferiría llevar ambas. Si las circunstancias no lo permiten, y sólo pudiese tener uno de estos elementos a mano, definiría previamente qué tipo de tareas podría enfrentar, para decidir cuál elegir.
Un cuchillo del Ejercito Suizo, o un plegable multiusos de varios accesorios de similar concepción, tiene ciertas aplicaciones y características -sobre todo en tareas que requieren de hojas de corte- que los hacen más cómodos y compactos. Igualmente son más indicados para llevar en el bolsillo, o en un estuche en el cinturón, de una manera más discreta, como por ejemplo cuando transitamos en una gran ciudad.
Las Multi Herramientas son más grandes y pesadas. La característica que las distingue de un cuchillo plegable es la presencia de las mandíbulas de una pinza, accesorio que rara vez aparece en un cuchillo de bolsillo de hojas plegables. Obviamente este elemento y su mayor tamaño y peso, hace que sea más conspicua su portación en un estuche en nuestro cinturón, única manera práctica de llevarlas. Aunque por supuesto, en un automóvil, podemos llevar muy fácilmente una Multi Herramienta bien a mano.
Mi consejo es entonces, tratar de adquirir un ejemplar de cuchillo plegable multi-usos, y también, una multi herramienta, y decidir en cada caso si conviene o no tener a ambos utensilios a mano, según las circunstancias. En algunas profesiones o actividades, como personal de montaje de equipos de TV por cable, instaladores profesionales de otros tipos de equipos, services a domicilio, mecánicos, etc., ya se ha impuesto el llevar una multi herramienta en el cinturón en todo momento. Igual ocurre con personal policial, especialmente miembros de equipos de salvataje, bomberos, tripulantes de ambulancias, etc.
Quienes trabajan en el campo, a bordo de una cosechadora o un tractor, seguramente encontrarán reconfortante y muy útil llevar una multi herramienta en el cinto, al igual que un conductor de un camión de transporte a larga distancia.
Para quienes disfrutan de la vida al aire libre y los campamentos, la presencia de ambos elementos significará tener la posibilidad de resolver cualquier eventualidad de reparaciones o arreglos menores de los que usualmente se presentan en estas salidas. Lo importante creo yo, es tener bien claro cuáles son las aplicaciones donde sobresalen o se imponen uno u otro tipo. Generalizando, digamos que para tareas de corte, los cuchillos plegables sobresalen, y para tareas donde se requiera una mini herramienta, y especialmente una pinza o alicate, la multi herramienta se llevará los laureles.
Modelos y Marcas. Elección del más adecuado
Como hemos comentado, a partir de la Leatherman original, que se importa a nuestro país desde hace algún tiempo y en diversos modelos, existen en plaza otros ofrecimientos de distintas marcas que hacen difícil la elección.
Aconsejar tal o cual se hace muy complejo, ya que se encuentran en juego distintos factores a la hora de elegir: marcas, precios, tamaño “full” o “compacta”, cantidad de accesorios adicionales a la pinza, y muy importante: el sistema de plegado de la misma. Este último detalle es importante, pues existen distintas soluciones a la hora de plegar o de poner en uso la pinza, según la idea de cada fabricante. Este asunto queda sujeto al gusto o punto de vista personal de cada usuario. Después de examinar algunas marcas distintas, podremos tener una idea de cuál nos parece más práctica o fácil de usar.
Por otra parte, algunas marcas o modelos, como la Swiss Tool de Victorinox -marca famosa por sus cuchillos del Ejército Suizo- ofrecen modelos con un accesorio separado, con diversas puntas de destornillador, que es una interesante opción a la hora de contemplar una compra, aunque ciertamente, todo elemento adicional, significa mayor bulto y peso, y mayor espacio requerido en el estuche de transporte.
Como regla general, el mejor consejo que puedo dar, es que se evalúe su compra entre marcas de primera línea, como Victorinox, Wenger, Gerber, Buck, Kershaw, SOG, Coleman, o por supuesto, la original Leatherman. Si usted elige dentro de esta gama, todo es cuestión de quedarse con la que más cómoda le parezca o más le agrade estéticamente, ya que por su calidad, puede quedarse tranquilo con cualquiera de ellas.
Distinta es la cosa, cuando le ofrezcan modelos “chinos” de marcas desconocidas, o directamente sin marca, o algunos modelos de marcas propias ofrecidos en los grandes centros de compras de un supermercado, de dudosa procedencia y calidad de materiales. En este sentido, la calidad que garantiza una marca prestigiosa, nos asegurará contra dolores de cabeza, o herramientas que fallan ante el menor esfuerzo y en el momento más inoportuno.
Finalmente, para quienes creen tener todo o piensan que han visto todo lo que el mercado ofrece, sugiero darse una vuelta por la coqueta tienda-taller de Adrián Pallarols, en la calle Marcelo T. de Alvear. Este joven y talentoso platero ofrece unas Multi Tool Victorinox, “customizadas” por él mismo, con sus cachas originales trocadas por otras de plata, totalmente cinceladas a mano por el artesano. Un toque exótico y “super fashion”, que le facilitará afrontar cualquier reparación de emergencia con gran estilo.
Copyright Abel A. Domenech. Derechos reservados.
El autor
Abel A. Domenech es un investigador, escritor especializado, y autor de 5 libros y centenares de artículos sobre el tema. Ha dedicado más de 35 años al estudio de la historia, tecnología, uso y coleccionismo del cuchillo. En este carácter es conocido en diversos países de América y Europa, donde sus libros y artículos son leídos y consultados como referencia. Para cualquier consulta sobre el tema, puede contactarse en su mail: dagasdeplata@yahoo.com o a través de su página web: www.domenech.com.ar
Notas de Técnicas y Productos en ediciones anteriores
- El delgado hilo entre la vida y la muerte
- El cuchillo y el aire libre
- Esa enemiga de los campamentos
El espacio de los lectores
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Muy buena la nota, gracias por los datos.
Comentario bajo el anterior sistema de Jorge M Loitegui | 16-04-2011
que mas se puede decir del señor domenech , excelente la nota y muy buena informacion , gracias a sus consejos he adquirido piezas de gran calidad
Comentario bajo el anterior sistema de mario | 28-01-2011
GENIAL, sin desperdicios para los que somos fanáticos de las cortaplumas y multipropositos.
Comentario bajo el anterior sistema de Marcelo de la Sota
muy buena la nota, es totalmente cierto lo de la calidad, mi consejo al igual que el de la nota es comprar SIEMPRE articulos de marca reconocida y fabricados en paises como eeuu, alemania, suiza, etc. es preferible adquirir un producto mas basico y de marca reconocida antes que uno supercompleto y fabricado quien sabe por quien. Personalmente tengo una Letherman que me ha sacado de mas de un apuro.
Comentario bajo el anterior sistema de matias